Su abuela tenia, entre otras cosas, unas pocas buenas costumbres.
Entre ellas, tenia la habilidad de contarle cosas para que se durmiera, pero a veces lo conseguía y otras no. Una noche hablaban de casas, como cada casa tenia puntos en común con sus dueños y como tenían personalidad y hasta tenían su propio olor, hasta que le explicó que las casas eran como las personas.
-¿Qué quieres decir, yaya?, eso no es posible
-Claro que lo es, y además te lo demostraré
-Verás, cada una de las partes de la casa se corresponde con una parte de tu cuerpo, y así puedes saber que tipo de casas son y que personalidad tienen.
- Venga ya abuela, que no cuela.
- Que sí, que sí, mira, por ejemplo, el despacho, el despacho es el cerebro, es allí donde se estudia y donde está la información importante, y también es allí donde se toman la decisiones, el despacho es la inteligencia y el cerebro
- Si, ya -contestó ella , demostrando que no le convencía en absoluto
- La cocina, piensa en la cocina. la cocina es el estómago, allí es donde está todo lo que te alimenta
Aquel tono melodramático que alcanzaba la conversación y su ausencia de sueño, hicieron que su cara de cuatro y su escepticismo romántico se sublevaran por completo.
Esta tarde vinieron dos operarios de una tienda de muebles a cambiarle la cama. Llevaba su dormitorio toda la semana vacío, sin aquella mediana cama heredada y vieja, y con cierto aire decadente que sus vecinos le imploraban que cambiara a golpes de pared los fines de semana y que el a mi mismo me prometía que tenia que hacer ya, sin esperas, desde hacia bastante tiempo. Mientras montaban su nueva cama y el eco de la habitación se iba esfumando, pensaba en la historia de su abuela, y que quizá no estuviera tan equivocada, que algo había cambiado.
Además de su cama.
24/9/09
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Un cuento precioso, no siempre conseguimos atrapar a la primera pero dejamos las semillas y con los años crecen y se hacen vida. No tengo sueño y si creo que las casa son como las personas y en cada habitación está nuestro espíritu, el alma, sueños, nosotros. Saltibrincos
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ResponderEliminarHola María.
No me había enterado de este tu otro espacio donde poder entrar y hablar contigo
Mi despiste es irremediable. Te eché mucho tiempo de menos y solo conocía tu blog de poesía donde no podía dejarte comentario.
Me encanta tu relato, su espíritu, lo que dices y como lo dices... Y me encanta poder alcanzar tu orilla otra vez. Seguiremos conversando.
Gracias por ti, por tus hermosas palabras.Besos de mar.
Opinio como tú Ester las casas tienen el aroma de quién las ha habitado, para lo bueno y a veces , lo no tan bueno
ResponderEliminarGracias por tu huella
abrazos con brisa de mar, que falta hacen, al menos aquí
Hola mi hermosa Soco
ResponderEliminarNo eres despistada querida, es que este blog ha estado oculto durante bastante tiempo, solo lo conocían antiguos compañeros de letras , después de mi desaparición ( necesaria) me he decidido a abrirlo y dejar también la opción de compartir sensaciones.
Los demás, como ya le he comunicado a más de un compañero los tengo cerrados por una sencilla razón, son escritos del pasado año, la mayoría , publicados en otro lugar y que por cuestiones personales no quiero perder , además en el blog lucen más bonitos, jajaja
un beso y un abrazo de mar , hasta tu orilla cercana ( y supongo que hoy calurosa )
en el resto de mis blogs está mi correo para cuando desees eh!
Gracias por venir a este pequeñito e intimo rincón , se agradece de corazón
:)
Que bueno!! No te voy a comentar sobre este bonito cuento, pero me recuerdo a mi abuelo paterno al que conocí en mis nueve primeros años de vida, pero fue con sus millones de historias todas en su cabecita quien me dejó la forma que tengo hoy de ver la vida y sobre todo de vivirla y sentirla, lo disfrute poquito, pero me lleno mucho.
ResponderEliminarHola Agapxis !!
ResponderEliminarNo comentas dices ? has comentado algo hermoso e importante , vivencias reales, tuyas , esas que como bien dices te han dejado una impronta , una huella, mil historias y seguro que muchas sonrisas , al recordar a tu abuelo
sabes? yo también perdí al mío ( al paterno) cuando tenía 10 años, no fueron muchos es cierto pero me marcó de por vida, más aún si cabe pues el materno se murió cuando mi mamá era un bebé, y por tanto no tengo memoria, ni recuerdos, salvo algunas historias contadas en familia
Era un ser adorable , cariñoso y culto , de él heredé el gusto por la zarzuela ( era barítono en varias compañías) por la música clásica , por la cultura gallega
Atesoro sus libros y sus dibujos a plumilla y tantas historias que me llenan la vida como pocas personas lo han hecho
un besazo y gracias mil
me gustó el relato , felicidades María
ResponderEliminaren mi casa no hay una parte dedicada al cerebro jajaja , si mucho corazón y estómago
acá hacerse de un estudio no da , las casitas normales son una cajita de fósforo
claro que hay otras que más parecen palacetes pero ni creas que hay mucho cerebrito allí jajajaja
besitos de sol
Nunca hubiese visto una casa desde ese punto: el estómago, el cerebro... qué original tu entrada y además con un toque entre nostálgico, infantil, cercano... me ha gustado mucho.
ResponderEliminarSAludos.
ResponderEliminarLos abuelos saben por años y por saber guardar secretos leíos y escuchados. Muchos de mis cuentos han nacido delas historias que mi abuela contaba. Me encanto María.
mariarosa
Me gusto mucho el cuento de la abuela y su nueva cama
ResponderEliminarLas yayas siempre dicen la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad...
ResponderEliminarBesos.
Un cuento con mucha miga, María.
ResponderEliminarYo creo como esa abuela del relato que las casa dicen mucho de las personas que las habitan, hay casas desangeladas, casas frías de revista y casas vividas, las mías siempre son vividas, eclécticas pero armoniosas y con un punto friki que sorprende y hace sonreír.
La historia de la cama me recordó a una amiga que tuvo una relación tormentosa y oscura, y cuando ésta acabó, y él se marchó lejos, hizo limpieza de enseres, pintó su casa de colores pastel, recicló algunos muebles anodinos y los llenó de detalles, y sobre todo cambió definitivamente su gran cama de matrimonio, por otra grande y confortable para compartir sólo esporadicamente. Una pareja estable necesita más espacio y ella ya no quería eso.
Me ha encantado descubrir este rincón, MaRia
Un beso,
Un relato muy bueno y con la magia que siempre envuelve a los cuentos de las abuelas.
ResponderEliminarLas casas y los muebles van adquiriendo mucho de los sentimientos de sus habitantes.
Un gran besazo, linda.
Me encanta este blog tienen luces
ResponderEliminarYo creo que en las casas se queda la impronta de las personas que las habitaron, las casas tienen alma y te abrazan cuando estás triste.
ResponderEliminarmuchas gracias por tus huellas María,
ResponderEliminarbuen fin de semana para ti también
un abrazo
Ely
ResponderEliminarte puedo decir que no sé que hay en casas ajenas , solo entro y disfruto la compañía pues en ellas suelo sentirme como en mi casa, si no no voy .
También te puedo decir que hay de todo, desde chabolas, casas de aldea humildes y a la vez acogedoras, y cementerios de pisos interminables y mansiones ... quiero pensar que no importa el envase si no el contenido pues a veces el oro reluce porque es oro de verdad al igual que la hojalata también reluce pues su composición invita a ello
creo que me fui más allá d tu comentario pero es que me has dejado pensando en quiénes viven en un lugar u otro y como son jejeje
un beso y gracias por pasarte aunque llegue mi agradecimiento con un poquito de demora
Hola Manuela Fernández tal vez sea un poco inusual hablar de la casa como el cuerpo de un ser humano, aunque al menos en mi caso siempre he sentido la cocina como el corazón del hogar , de ahí que reciba a quienes mas estimo en ella, de ahí que adore escribir también sobre la mesa que tengo en ella mientras muchas veces me deleito con los olores de la comida que preparo para mis "amores"
ResponderEliminargracias por tu huella y vuelve cuando gustes
Intentaré pasarme pronto para conocer tu espacio ,
y disculpa que tardase demasiado en contestarte, he estado de viaje un tiempo y cuando viajo desconecto de este mundo, que también adoro, pero ya se sabe no se puede estar en misa y repicando
buen finde
Querida Mariarosa podría decirte que te envidio, te envidio con esa envidia sana, pues lo es, de haber disfrutado mucho de tu abuela , de que ella sea quien te inspira tantos maravillosos relatos.
ResponderEliminarPersonalmente no he disfrutado tanto como yo hubiese querido de mis abuelas. La materna se fue cuando apenas yo tenía dos años y conozco su historia, sus historias de escucharlas a mi madre y sus hermanos. Es es de esos deseos que sé que nunca se podrán cumplir pues sé a ciencia cierta que era una gran mujer, luchadora , cariñosa y sabia. Mi abuela paterna sin embargo la disfruté hasta hace pocos años, claro que la distancia física era un impedimento para poder estar con ella todo el tiempo que me hubiese gustado
Ambas tan diferentes y a la vez tan buenas mujeres y tan sabias
Un Abrazo muy grande que te llegue cruzando este inmenso charco que ya sabes, a la vez nos une
buen finde :)
Citu
ResponderEliminarllegaste y me alegre muchísimo , no tengo perdón pues en el reencuentro me he tenido que volver a marchar , pero prometo volver a tu casa si puedo hoy mismo, sé que solo son palabras escritas en un comentario pero van desde el corazón y créeme con las mejillas sonrosadas porque me da un coraje inmenso
gracias preciosa por venir y por tu huella , eres un cielo
besitos
Elvis tienes toda la razón , a veces hasta podemos pensar que son un poco crueles ( me estoy acordando de una verdad que una de mis yayas me dijo y me rompió los cimientos , o me bajó al mundo real) pero es así, tal cual dices
ResponderEliminarpd1. lo mismo acabo contando la historia que te comento
pd2. al igual que le he dicho a los demás comapañeros, disculpa mi demora en responderte, espero poder pasarme prontito por tu casa virtual .
buen finde , espero que estés disfrutando esta primavera loca, loca , loca ...
besos
Tesa estoy convencida que tu casa tiene vida, y cuando digo vida, es que está llena sensaciones, de sentimientos ( pues para mí la decoración no es solo objetos si no que esos signifiquen algo para nosotros, que nos den calor al alma, alegría a la vista y al menos en mi caso dan que hablar pues como soy de culo inquieto parecería que las cosas tienen patas, las muevo de un lado al otro, sean figuras, cuadros o lo que en un momento x me pida el corazón )
ResponderEliminarMi casa soy yo o yo soy mi casa , dentro de mi caótico orden, no soporto que pasen mucho tiempo en la misma ubicación, influye mi estado de animo, o mismamente el tiempo que hace
Hay casas d revista ( adoro la decoración por eso soy asidua a las revista de deco) hermosas llenas de humanidad, otras me gusta verlas , impolutas, ordenadas, pero .... a la vez desangeladas y eso Tesa querida creo que no es lo mio
gracias a tí por pasarte, por comentar, por ser un alma de luz , creativa, inquieta y maravillosa mujer !
Disfruta de Madrid que debe de estar hermosa estos días ( como siempre)
Será por eso que a veces hago "limpieza " de trastos que no me dicen nada? Mire ... será por eso que si tengo en la casa un mueblecito que no me habla llega un momento que me estorba ... es como si me chupara el aliento (jajaja) es más , después de mi divorcio poco ha quedado hay que sanearse, al igual que es bueno sanear el cabello para quitarse las malas vibras ;)
ResponderEliminarun abrazo , y gracias por tu huella, viniendo de ti es un halago que no sé si me merezco !
te mando un brillo de sol gallego y primaveral :) con brisa de mar, eso si !
Gracias Mucha
ResponderEliminarla luz la tienes tu, en cada paso, en cada palabra, y sin dudarlo seguro , en cada movimiento que das , brillas !