Yo soy el por y tú el que
Curiosas palabras.
Cuando están separadas, preguntan.
Y cuando se juntan, responden.
Yo soy el por y tú el que.
Porque te necesito.
Porque me alivias, me enjuagas, me cuidas.
Porque te siento y me tranquilizo.
Porque me alimentas, me insuflas,
me inhalas, me embaucas y me bebes.
Porque lo eres todo para mí.
Ayer, hoy, mañana, siempre, siempre
Y después cuando tengo las respuestas, me acosan de nuevo más preguntas.
¿Por qué no puedo tenerte siempre?
¿Por qué nunca es todo como quiero?
¿Por qué a veces no me entiendes?
¿Por qué no me explico suficiente?
¿Por qué mi modo te provoca angustia?
¿Por qué tu modo me da quebranto?
¿Por qué no me limito a disfrutarte?
Respuestas, preguntas…
Dos palabras, a veces sueltas preguntando
Otras juntas respondiendo, dando…
¿Por qué ?
Pues simplemente porque así somos dos, y a veces uno
Entradas
Preguntas unas veces retoricas otras indagadoras, lo importante está en las respuesta, evasivas a veces. Comprometidas nunca.
ResponderEliminarEstermarin43@gmail.com para muy pocas personas.
“Descanso en este invierno
entre una alfombra de pétalos
y la sombra de un cálido sol”
Que tu invierno sea brujo y te ofrezca lo que quieras justo en el momento del deseo.
Y es que no todas las preguntas tienen respuesta,... ni todas las respuestas se contestan tras una pregunta.
ResponderEliminarFelices Fiestas!
¿Por qué lo queremos saber todo? Casi siempre nuestra cabeza es un torbellino de preguntas que suelen opacar lo que estamos viviendo en la búsqueda de lo mejor o de llegar a fondo en todo.
ResponderEliminarHay momentos para hacer(nos) preguntas y otras para estar en silencio.
Tus poemas siempre son bellos y llevan a la reflexión.
Un abrazo enorme y felicidades, María.
ResponderEliminarMe gusta cómo juegas con el por y el qué, me gusta la observación de que separadas preguntan y juntas responden, seguramente porque las respuestas nunca aparecen en soledad (aquí se me ocurren tantas explicaciones que mejor ni me aventuro).
Me encantan las preguntas, pero a veces es mejor no pensar tanto y sentir más.
Bicos, MaRía
hola, cómo estás, Capri ¿?
ResponderEliminar[no te/me hagas preguntas a cerca de este saludo, porque si no tendré que responderte; y total para qué, si ambos dos sabemos la respuesta, ¿no?]
uhmmm ... esto ... qué te iba yo a decir, o mejor dicho a añadir ...
¡¡ah, sí!! [qué cabeza la mía] : traigo manzanas, ¿quieres una?; están d'abuten; son de las rojas, de las dulces.
mis mejores deseos para que, de aquí pa'lante [no solo a lo largo de el próximo 2020, que también] y hasta el día que dejes tu existencia terrenal, TE VAYA TAL Y COMO SUEÑES CADA NOCHE DE AQUÍ HAS EL FIN, que no es el fin no un nuevo principio
PD : pero, ¡¡espera, espera!!, que tengo un comentario, además de este, para tu otro blog ... Terra IgnotA ©® || entrada : 'A mis ojos'; digo, 'A tus ojos' [en qué estaría yo pensando] y dice asín : ¿Calle 13?, ¡¡me chiflan!!; ya te digo :-)
y ahora sí : me despido; hasta que vuelvas a escribir, y asín sucesivamente; o eso creo
¡¡muuack!!
______
Por qué me gustas tanto?
ResponderEliminarporque eres especial
:)) :))
Beso grande.
Y sin embargo, conocemos la mayoría de las respuestas. Otra cosa es que nos atrevamos a contestarnos.
ResponderEliminarUn beso, María. :-)
El amor es así, hay veces que somo dos y otras uno. El amor , la paciencia y la compresión hacen que una relación siga. Adoro tus poemas te mando un beso
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