Ella viene de una isla que quiso construir el paraíso.
Zoé Valdés . La nada cotidiana
Deseaba llenar aquel vacío que la llenaba
Cosió un nada por aquí
un nada por allá
otro retal por el envés
Poco a poco
llenó el vacío de nadas
y el vacío desapareció
Una mañana
cuando ya nada le llenaba
vacía de nada
suspiró
¡Pensar que tuve tanto!
Y ahora
Ahora deseaba volver
volver estar llena de nadas
pues vivir así tan vacía
era lo mismo que morir
sin esperar nada
María
Nos nombra
y asistimos al escondite,
al inexistente elemento.
Nos piensa indiferente,
jugamos con su insinuación,
exorcizados.
Nos escucha,
nos pide el cuerpo,
nos devuelve nuestra sombra en mármol.
Ya somos las estatuas del aire.
[Los espacios imaginarios, Zoé Valdés]
sin esperar nada
María
Nos nombra
y asistimos al escondite,
al inexistente elemento.
Nos piensa indiferente,
jugamos con su insinuación,
exorcizados.
Nos escucha,
nos pide el cuerpo,
nos devuelve nuestra sombra en mármol.
Ya somos las estatuas del aire.
[Los espacios imaginarios, Zoé Valdés]
Retales de mi vida...
ResponderEliminarhttps://www.youtube.com/watch?v=soVfDVC_L3s
pd. yo no estoy indecisa, estoy nostalgica. :)
Besos preciosa llenos de todo.
A veces, es necesario sentir dentro de nosotras el vacío para avanzar y buscar llenarlo con cosas que nos llenen y satisfagan.
ResponderEliminarLa primera fotografía es impresionantemente hermosa.
Un beso grande!
Somos Nada y no hay Nadie
ResponderEliminarpero una Nada que a veces baila
y un Nadie que puede volar.
Besos
Los dos poemas se nutren, se tocan, cuando todo parece ingrávido, sin peso, sin figura, a pesar de los contornos. Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarMuchos nada vacían el espíritu, demasiados nada secan el alma, después no hay suficientes nada para amortiguar la soledad. La imagen de la puerta impacta como la foto de las manzanas donde habita un animal imprescindible, sin ti la naturaleza estaría falta de poesía. Buenas noches te dejo estrellas en tu ventana
ResponderEliminarHermosos poemas , a veces todo quedaa en nada . Te mando un beso
ResponderEliminarPor eso me gustan los equilibrios que nisecsaturan ni tienen carencias, la vida es difícil de llevar.
ResponderEliminarZoe y tu tenéis ese inconformismo que os impulsa a buscar en lo más profundo.
Besos
Un recipiente vació es más importante que uno lleno. Te mando un abrazo.
ResponderEliminarCuando hay tanta nada dando vuelta en el interior, es imprescindible buscar algo, por mínimo que sea, para llenar el vacío. Un algo que nos haga bien, no importa si dura unos minutos.
ResponderEliminarLeí ese libro de Zoe Valdés, hace mucho. Es una escritora muy potente y apasionada.
Hermoso post, letras, imágenes y música.
Un gran abrazo, María.
ResponderEliminar¡Tanto que llena la nada, que cuando está presente nada más cabe...!
No podría elegir cuál de tus poemas me gusta más, pero sí que éste es uno de ellos.
Bicos!!
PD. La canción, además de recordarme una época de mi vida en que Orishas puso la banda sonora, me recuerda también a Nonito Pereira (supongo que sabes de quién hablo) que nos dejó esta semana. Gracias a él los vi en directo una primera vez, pues él con su hijo los llevó a Coruña. También tuvo mucho que ver con la segunda vez que los vi. La escucho hoy como homenaje a él.
Sorprenderse con todo lo que ocurre, sentir la magia de la vida de nuevo,... como cuando uno era pequeño,... la ilusión de la infancia frente a la madurez de un adulto, como el reverso de la moneda.
ResponderEliminarBuen fin de semana!
Hermosa costurera
ResponderEliminarTe beso