Ella viene de una isla que quiso construir el paraíso.
Zoé Valdés . La nada cotidiana

Deseaba llenar aquel vacío que la llenaba
Cosió un nada por aquí
un nada por allá
otro retal por el envés
Poco a poco
llenó el vacío de nadas
y el vacío desapareció
Una mañana
cuando ya nada le llenaba
vacía de nada
suspiró
¡Pensar que tuve tanto!
Y ahora
Ahora deseaba volver
volver estar llena de nadas
pues vivir así tan vacía
era lo mismo que morir
sin esperar nada
María
Nos nombra
y asistimos al escondite,
al inexistente elemento.
Nos piensa indiferente,
jugamos con su insinuación,
exorcizados.
Nos escucha,
nos pide el cuerpo,
nos devuelve nuestra sombra en mármol.
Ya somos las estatuas del aire.
[Los espacios imaginarios, Zoé Valdés]
sin esperar nada
María

Nos nombra
y asistimos al escondite,
al inexistente elemento.
Nos piensa indiferente,
jugamos con su insinuación,
exorcizados.
Nos escucha,
nos pide el cuerpo,
nos devuelve nuestra sombra en mármol.
Ya somos las estatuas del aire.
[Los espacios imaginarios, Zoé Valdés]